Tras atender a su amiga como nunca, estaba claro que entre los dos pasaría algo, ya que llevan mucho tiempo flirteando y cuando se quedaron solos, surgió el momento. El chico no dudó en aprovechar y como no, quiso tener un bonito recuerdo de ese polvazo, colocando una cámara oculta de la que ella no se percató. Así al poco rato, ella se lanzó a chupársela antes de quitarse las bragas y disfrutar de su rabo, en una follada que a los pocos días terminó subida a la red.