En lugar de enseñarle su país y su gastronomía, esta joven latina quiso darle a probar a este turista algo mucho mejor. Y es que tras flirtear con él estando en un bar, la morena le invitó a su piso y ambos en seguida supieron en lo que querían gastar el tiempo. La chavala es muy zorra y no pudo evitar seducirle en el dormitorio, donde acabó a cuatro patas dispuesta a disfrutar del rabo de un desconocido, mientras la cámara de su móvil lo grababa todo para tener un bonito recuerdo.