Ya que lo de ser modelo no pareció triunfar, esta guapa asiática terminó probando suerte en un casting porno. Primero pensó que solo debería posar ligera de ropa o desnuda, pero la cosa no se quedó solo ahí. Y es que tras exhibir su cuerpazo natural, la oriental vio como aparecía un chico mulato muy dotado y la animaron a grabar una escena. Al ver su polla ella sintió curiosidad y finalmente, accedió a probarla y terminó gozando de la follada interracial, mientras miraba con ojos de golfa al objetivo de la cámara.