La jornada de trabajo de esta guapa secretaria suele ser muy aburrida y la verdad es que anda un poco quemada con su curro. Una tarde volviendo a casa por la calle, un desconocido le ofreció un trabajo como modelo, ya que le dijo lo hermosa que era y que tenía un cuerpazo. A ella le gustaron tantas alabanzas y decidió apuntarse, sin saber que al final se trataba de un casting porno. Tras posar con un traje rosa muy bonito, le pidieron que fuese quitándose la ropa y al final, lograron convencerla para que follase con el chico ante las cámaras, demostrando que en el fondo puede ser una auténtica golfa.