Tras pillar un billete a un país tropical, esta preciosa morena se dispuso a relajarse y a lucir pechotes por cada rincón de ese paraíso, logrando atraer las miradas de los chicos del lugar. Una mañana mientras se relajaba en un jacuzzi, un desconocido se le quedó mirando y ella decidió atacar usando su delantera. Pronto le notó cachondo y como no, le pidió rabo allí mismo y se lo acabó chupando, antes de montar sobre él y gozar de intensos orgasmos con un polvazo increíble.