No le hacía mucha gracia el plan, pero al final este chico acabó saliendo de caminata con su novia mexicana. Fueron a paso ligero y tras una pequeña subida, hicieron un alto para descansar en pleno bosque. En ese momento, la chavala quiso agradecerle el detalle de pasar el día con ella y haciendo algo que no le gustaba demasiado, así que le puso una sonrisa en la cara chupándosela al aire libre. El chaval no se lo esperaba y al final, los dos terminaron follando como animales junto a los árboles.