Mientras otras chicas se muestran algo tímidas, esta morenaza en su primer casting está dispuesta a demostrar lo que sabe hacer. La chica es muy guapa y tiene un cuerpazo que quita el sentido y que pronto muestra ante las cámaras. Al poco rato aparece el chico encargado de grabar la escena con ella y al verla con tantas ganas, se pone manos a la obra y lo da todo. Ella no para de gemir durante toda la escena y sin duda, salió de allí más que satisfecha y dejando claro de lo que es capaz con un buen rabo a mano.