En algunas ocasiones, esta pareja mexicana ha recibido quejas de los vecinos, ya que suelen ser muy ruidosos en la cama y terminan molestándolos. Para evitarlo, decidieron una noche irse a un hotel y alquilar una habitación donde tuvieron la libertad para hacer lo que les diese la gana. De hecho hasta se llevaron una cámara para grabarse en plena faena, dando rienda suelta a su pasión y gozando de un polvo memorable que ahora podrán recordar gracias a la escena que filmaron juntos.