Estas dos preciosidades estaban disfrutando de un día de piscina tranquilamente, tomando el sol en bikini y relajadas sobre la hamaca. Invitaron a casa a dos amigos y cuando las vieron luciendo sus curvas, no pudieron evitar ponerse cachondos. Encima ellas no paraban de menear sus culazos y al final, tuvieron que meterse en el apartamento para sofocar ese calentón. No tuvieron problema en escoger polla ni en compartirlas, hasta cabalgar a ambos chicos en un cuarteto de sexo donde ambas terminaron más que satisfechas.