Sin dudas, esta pelirroja obesa y con sobrepeso está muy lejos de los cánones de belleza actual y por eso, la mayoría de chicos no se fija en ella. Ya hace tiempo que no disfruta de un buen rabo, pero parece que hoy al fin su suerte va a cambiar. Y es que tras salir de compras, conoció en el supermercado a un amante de las chicas gordas y tras hablar con él, le invitó a su casa. Una vez a solas, la muy golfa se sacó ese par de tetazas para que las probase y abierta de piernas, le dejó embestir su coño grasiento a pollazo limpio.