Después de un día muy largo en la universidad, esta chica solo quería llegar a casa y tumbarse en la cama. Pero cuando entró en su dormitorio, se encontró con su padrastro oliendo sus bragas e intentando disimular lo ocurrido. Quiso pedirle explicaciones y la verdad es que el hombre se moría de vergüenza. Por suerte la jovencita no le dio tanta importancia, sobre todo cuando vio lo empalmado que estaba. De hecho prometió no contarle nada a su madre si a cambio le regalaba una buena sesión de sexo. Así que ni corta ni perezosa se metió en la cama con el marido de su madre y follaron como animales, antes de poder ser pillados.