Sin duda, la hermosa Rachel Roxxx no es tonta y a la hora del sexo, siempre prefiere un chico bien dotado de cintura para abajo. Hoy conoce a un semental español y cuando el chaval se saca el rabo, la tetona se queda con los ojos como platos. Pronto demuestra su experiencia repartiendo mamadas, para luego cabalgar sobre el chico en el sofá, donde se marcan un polvazo y antes de acabarlo como a ella más le gusta, con su lefa en toda la cara.