Parece que el marido de esta chica anda un poco pachucho, así que pide a una enfermera para que le tome la temperatura y le cuide un rato. Aunque al final, la compañía de las dos gordas lo que hizo fue hacer que subiese su fiebre, aunque no por la enfermedad sino por lo cachondo que le pusieron. Así que al final, el mejor remedio que pudieron darle fue un trío casero, donde ambas montaron sobre su rabo y menearon sus carnes sobre la cama.