Tras elegir España como lugar de visita, esta turista inglesa se quedó asombrada con los edificios históricos y el paisaje. Pero al final en lo que más se fijó, fue en su guapo guía con el que no paró de flirtear durante todo el rato. De hecho en uno de sus paseos, la tetona se paró y se puso de rodillas, para chuparle la polla sin dudarlo. El tipo no pudo evitar seguirle el juego y aunque estaban en un lugar público, remataron la faena con una follada en medio del camino.