Parece que ver a su novia lavar el coche es algo que a este chaval le pone y mucho, algo que se notó cuando la vio menear su pandero y se lo llenaba de jabón. Estaba claro que estaba consiguiendo ponerlo cachondo y al final, ella le dejó meterle el rabo a conciencia. De hecho, empezó a jugar con su ojete y ella se sintió lista para experimentar sexo anal por primera vez, algo que terminó con una enculada muy bestia en el jardín que ambos disfrutaron y mucho.