Uno de los pasatiempos de este chico es la cerámica, por más que a muchos les sorprenda. Para él es una manera muy relajante de pasar el rato y su novia quiso probarlo. La jovencita se sentí y puso sus manos sobre la arcilla, pero el chaval fue muy juguetón mientras le enseñaba, acabó dándole forma a una polla de arcilla. Ella empezó a reírse y se dio cuenta de lo que estaba pasando, haciendo que entre los dos la cosa fuese subiendo de tono. Al final se fueron calentando cada vez más y tuvieron que dejar la clase para otro día, ya que se deseaban mutua mente y no dudaron en lanzarse a follar en el sofá.