De paseo por un barrio cualquiera, estos chicos vieron a una morena tetona muy guapa y le ofrecieron dar un paseo. Le ofrecieron transporte gratis aunque claro, a cambio quisieron que ella les diese algo a cambio. Lo primero que hizo la chica fue enseñar sus melones y dejar que uno de ellos los tocase con sus manos, comprobando lo grandes que eran. La cosa se fue calentando y mientras uno de ellos seguía conduciendo, ella se puso las botas follándose a ese chico en el asiento de atrás.